Entrevista con Lola Hernández:
Para saber más:
Consideraciones sobre las conductas inadecuadas AQUÍ
La autorregulación en el autismo AQUÍ
ESTRATEGIAS ANTE LAS CONDUCTAS DISRUPTIVAS
“Sabemos que el autismo
lleva implícito, en mayor o menor medida, unas particulares habilidades
sociocomunicativas, alteraciones del procesamiento sensorial, déficit en las
funciones ejecutivas y escasas estrategias de autorregulación. Si a ello le
unimos un entorno físico sobrecargado de estímulos, los cambios constantes que
se producen (impredecible) y las exigencias sociales, queda claro lo complicado
que es para una persona autista desenvolverse en el mundo social sintiéndose
bien”. Anabel Cornago
1 Seamos proactivos: RESPETAR, COMPRENDER Y DOTAR DE
HERRAMIENTAS
Es decir, trabajar sobre
todo en la prevención y ofreciendo herramientas para que la propia persona con
autismo sea capaz de irse enfrentando a situaciones de ansiedad y regularse.
Partimos de un entorno amigable para la persona
con autismo. Adaptaciones del entorno físico y sociales.
Propicia un entorno
amigable con el autismo (modificaciones físicas y sociales necesarias, según
las características de la persona) para prevenir en la medida de lo posible:
- Conocerlo muy bien y respetar su perfil sensorial (facilitar regulación tactil, vestibular y propioceptiva) y planificar actividades deportivas.
- Entorno predecible y claro: anticipaciones, agendas, claves visuales, rutinas
- Lenguaje claro e instrucciones concretas
- Sin sobrecarga cognitiva y con espacios/tiempos organizado y estructurado
- Instrucciones y materiales que faciliten la comprensión de las tareas
- Apoyo visual – NO RUIDO VISUAL. Usar los tres canales (visual, kinestésico y auditivo)
- Momentos de aprendizaje en contextos naturales: interacciones sociales
- Favorecer la generalización y la flexibilidad
- Desarrollar estrategias de autocontrol y regulación, con momentos de relajación y de dedicación a sus intereses.
Identifica la causa.
Conocer los detonadores va a facilitar encontrar la mejor manera de lidiar con
ello y calmar. Principales detonadores:
- Procesamientos sensoriales
- Dificultades de comunicación
- Inflexibilidad: problemas para tolerar y aceptar cambios. Necesidad de invarianza.
- Alto nivel de exigencia - Baja tolerancia a la frustración
- Confundir una recomendación con una crítica. Demasiadas veces han escuchado que tienen que mejorar, que lo están haciendo mal
- Dificultades en reconocer y regular sus propias emociones
- CONTEXTOS SOCIALES. Dificultad para comprender y manejar las relaciones interpersonales
- Adolescencia
Incluye actividades
sensoriomotrices a diario, además de la práctica de algún deporte (caminar,
natación, trepar, judo, equitación...)
Planifica tiempos para momentos
de relajación y de dedicación a sus intereses.
Crea un rincón tranquilo
en casa como en el colegio, donde el niño se sienta seguro y pueda usar para
calmarse. Llevarlo ahí cuando empiecen las señalaes, no en medio de la crisis.
Para ello explica con antelación que es para que se encuentre bien, no un lugar
de castigo. Elementos que podemos tener:
Deja claras de antemano
las expectativas y sus consecuencias. Explica, siempre antes de que pueda
ocurrir una conducta disruptiva, qué se espera de él en distintas situaciones
del día a día. “Si mamá te dice... es porque...”. “Si hacemos esto de esta
manera, es porque....”
Refuerza las conductas
adecuadas. Elogia y deja claro a tu hijo cuando está haciendo las cosas
tranquilo o está controlando su enfado. “Muy bien, se ha caído la torre y haces
una nueva”.
2 Si la conducta disruptiva aparece, el objetivo es CALMAR: permanece tranquilo, haz que se sienta seguro:
- Distráelo con algo que le guste mucho (por eso es importante conocerlo muy bien)
- Ten preparada una alternativa: por ejemplo, hablar sobre sus intereses
- Dirige hacia otra actividad, mejor si incluye estímulos sensoriales calmantes
- Cambiar el contexto y la situación, sobre todo si es por una hiperestimulación sensorial
- Mecerlo, cantarle una canción al oído, abrazarlo... dependerá del niño
- Buscar algo que le haga reír
- Evita el uso del no: “No grites”, los sermones o las negociaciones
- Hay ocasiones en las que la respuesta más eficaz es ignorar esa conducta disruptiva
3 Desarrollar habilidades
para poder responder bien ante situaciones de estrés y recuperarse además
rápidamente de esa ansiedad: estrategias de comprensión/regulación emocional y
de autocontrol
Por su estilo cognitivo
de pensamiento y su forma de procesar la información, las personas autistas son
más vulnerables a la ansiedad, se les dificulta el empleo de estrategias de
regulación, responden de manera más INTENSA y necesitan más tiempo para
reestablecer el equilibrio.
La autorregulación es la capacidad que tenemos para controlar
nuestros estados, impulsos y recursos internos. Hay tres tipos:
- Regulación fisiológica y sensorial: mantener un nivel adecuado de alerta y responder de manera apropiada ante los estímulos sensoriales del ambiente. Adaptaciones en el entorno favorecerán.
- Regulación emocional: partiendo de identificar su estado emocional y tener herramientas para expresarlo y regularlo. Intervención en emociones.
- Regulación cognitiva: el uso de procesos cognitivos o mentales necesarios en la resolución de problemas y habilidades relacionadas con la atención, transición y persistencia en las tareas. Aquí las las funciones ejecutivas juegan un papel fundamental: flexibilidad cognitiva y conductual, además de aumentar experiencias y recuerdos positivos
En el día a día
incluye:
- Respeta y nombra su emoción, y ayúdale con calma a comprender por qué: “sé que estás enfadado porque se ha caído la torre, mamá te ayuda a hacerla de nuevo”. “Sé que querías seguir jugando con el móvil, pero ahora toca cenar todos juntos”.
- Intervención en emociones: comprensión, expresión, interpretación, regulación
- Juegos de control inhibitorio y de flexibilidad
- Estrategias de resolución de problemas